Tuesday, March 20, 2007

Temporada de Caza

EL Desorden se complace en nutrir su Prescripción con algunas delicias de fotográfos-corresponsales de alrededor del mundo.

Desde Copenhagen, Copenhagen Street Style



(por si les interesa, en eBay)


Desde París (aunque ambas fotos fueron sacadas en Lisboa), FaceHunter.





Y desde Londre, en una foto sacada ayer mismo, TheStyleScout

Wednesday, January 31, 2007

Javier Fesser

En el Desorden estamos de enhorabuena.



El más reciente corto de Javier Fesser para notodofilmfest.

Tuesday, January 30, 2007

Vigalondo


Estréis habituados a su antiguo hogar en la red. Nosotros también estuvimos. Y aunque no se ha mudado aun de cuarto, podemos afirmar con holgura que la nueva morada de vigalondo
es periódica como el lugar que le aloja.



Fue un link iniciático en la carrera del Desorden. Y en su página conocimos a LaPetiteClaudine y a Esponjeiforme. Ahora, revelando nuestras fuentes (metapost), volvemos el rostro al nororiente y a la madre patria, esperando cumplir vuestro sueño: ser los distribuidores del nuevo largometraje de Nacho: Los Cronocrímenes.

Thursday, January 25, 2007

Ampliación del campo (de batalla)

Cansado de tu postura poscrítica? Te hartaste ya de cinismos? Alérgico ya a tu propio sentido del humor? Quieres aprovechar los progresos de la técnica para reconstruir el Chile Republicano de antaño? Confías, sino en el tuyo, en los cuerpos intermedios? Si respondiste que sí a todas estas preguntas, tal vez seas demasiado entusiasta. Sí respondiste que sí a una o dos, siéntete bienvenido a los brazos vecinales y cariñosos de Andrés Flores y adhiere a una postura honesta y moderna como la que más.
Se recusa, se implica y se tacha, el desorden.

Monday, January 15, 2007

Cirugía

Wednesday, January 10, 2007

Pancho & Pincho



Javier Fesser
, España, 2003
El Desorden agrega: yo estuve ahí.

Wednesday, November 29, 2006

Dos cuestiones

Vd., inocente señorita (o señora), que pasea como volando por los parques, malles y plazas de esta ciudad (o de otra); que disfruta de los placeres de la vida; que frecuenta discotecas, restaurantes, casas de masaje y, en fin, lugares públicos; Vd., que a los placeres de la modernidad a dicho ¡si, quiero!, merece conocer las innovaciones que a diario el Servicio de Patentes e Invenciones registra en sus anales, y, por qué no decirlo, vaginales.

A esta peculiar zona dedica el Desorden estas lineas. En primer lugar, visite Vd. Cono Mágico (gracias, susurrario anónimo) y responda "no" a la pregunta ¿Se Sentaría Vd. en un baño que no es el suyo? Discrepamos en todo caso con la similitud de género que aparece con el uso del producto de la inventiva nacional (vea, por favor, la demostración).

Habrá notado asimismo, que la mujer que demuestra el uso del Cono-Mágico es rubia. Pues bien, conocerá Vd. la expresión "taxi" aplicada a ellas, dando cuenta de la insalvable diferencia que existe entre la cabellera que adorna su testa de la que protege su vulva. Nancy Jarecki, estando en un peluquería en Roma, notó que el salir del lugar, las clientas se iban con una pequeña bolsa; inquirió nuestra protagonista a la dependienta, sólo para averiguar que la pequeñez contenía el elemento que haría combinar el norte con el sur. "Per sotto, per farli combaciare", habría dicho la recpecionista, que en buen cristiano viene a significar "par shoshi, que combine, no?". El producto, especialmente desarrollado y generado al efecto, viene en cinco colores: rosado (para el regalón), negro (para la sobriedad), rubio (porque lo pasan mejor), café (otros dirían castaño) y colorín (porque besar a un colorín da buena suerte). El producto puedes encontrarlo aquí. Y cuéntanos, después de su uso, qué se siente ser una verdadera rubia.

Qué atentos!

No queríamos llegar tan lejos. Pero bueno, nos interesa la posteridad, esa seductora que nunca se deja ver nítidamente, ni menos tocar. De ahí que reflexionásemos del sigiente modo: si es cierto, si llega a confirmarse ésta, la más sediciosa de las teorías, es mejor contarse entre los que publicaron la revelación en su minuto que entre los macdonaldianos timoratos y los cínicos postolerantes (aunque esos nos seducen, la verdad) que la silenciaron como gángsters. Así que aquí les va. Coméntenlo en la sobremesa. Desordénese la melena, alce el volumen de la voz y ataque a sus comensales con el material fogoso que le seleccionamos.
Por favor, presione aquí

Tenga, por último, el buen gusto de leerlo entero para contárselo después al oído atento pero algo incrédulo del desorden. Ya saben que nos gusta enseñar. Y que nos enseñen.